Los CDP marcan varios hitos para el mercadeo
El primero de ellos, el CDP logra que las áreas y la data dejen de funcionar en silos y pasen a funcionar de manera holística o integrada, pues hace una ingesta de cualquier fuente de datos, la procesa y la proyecta en una sola ventana, con esto un marketero logra observar de manera holística y profunda a su cliente o un segmento de ellos. Lo que antes para él estaba compartimentado, disperso e inconexo ahora está en un solo lugar a un simple vistazo.
El marketero, logra el máximo nivel posible del conocimiento de su usuario, en una sola visualización de los datos básicos de su cliente (nombre, datos de contacto, fecha de nacimiento) y de todos los datos “fluidos” o “evolutivos”, por ejemplo, lograra saber con exactitud con qué plataformas de su marca interactúa el usuario (web, apps, email, sms, call center, canales de compra físicos y online, etc.).
Antes de los CDP, era difícil conocer quiénes eran los usuarios anónimos de una marca/negocio. Los CDP develan ese secreto gracias a la inteligencia artificial, puede atribuir con alto grado de exactitud una navegación no identificada a un usuario previamente registrado. El marketero tiene entonces información del comportamiento real de su usuario.
Antes de los CDP un marketero requería horas o días para conocer la analítica de sus usuarios, ahora con los CDP no debe esperar, todo sucede en tiempo real. Entonces, sumando la visión única del usuario, la arista de tiempo real, tenemos que: el marketero ahora cuenta con información inmediata, actualizada al instante en un solo dashboard.
Por ejemplo que emails abre su usuario, cada cuánto visita su página, cuánto dura en ella, qué productos ha comprado, cuánto ha desembolsado, qué tipo de productos requiere, qué información busca, cuál es su propensión de compra. La inmediatez de esta información le ayuda a reaccionar de manera oportuna, el marketero nunca antes estuvo tan preparado para el time to market como se lo permite hoy la tecnología de los CDP.
Antes de los CDP no teníamos total certeza de que canales eran los más eficientes para comunicarnos con los clientes. Hoy, los CDP le permiten al marketero saber cuál es la probabilidad de que un usuario o un segmento de usuarios observen, abran e interactúen con la información que se les envía por determinado canal. Eso habilita al marketero a poner la plata en el lugar correcto, conocer con precisión el ROI y el ROAS. Adicionalmente el usuario final gana pues recibirá la información que espera, en el canal que él prefiere, en el momento adecuado.
Previo a los CDP la optimización de las acciones de mercadeo no se podían hacer en tiempo real. Los CDP gracias a la IA, el big data y el machine learning están constantemente, en tiempo real, retroalimentando las bases de datos, así todas las acciones del mercadeo pueden ir haciéndose más efectivas. Con un CDP un marketero puede activar estrategias y tácticas del mercadeo con extrema velocidad y precisión cómo estás: cross-selling, upselling, innovación de producto basado en data y retención de clientes, entre otras.
Antes de los CDP el journey del usuario y la presencia omnicanal del contenido y las ofertas de marca era difícil mapearlo de manera fidedigna. Los CDP, basados en la información que almacenan continuamente sobre la interacción de los usuarios con los canales, los mensajes y los productos, logran sugerir con altos niveles de precisión cuáles son los canales que los clientes realmente utilizan, permitiendo así que los marketeros pueden aumentar las tasas de conversión en los distintos puntos de contacto de su cliente con su marca.
Para terminar un CDP es una herramienta hecha para empoderar al marketero. La interface o el front, está hecho para que los protagonistas del mercadeo puedan de manera intuitiva y en su propio lenguaje, sin apoyo técnico, recolectar y unificar todas sus fuentes de datos, consolidarlas en un solo lugar, visualizar un conocimiento profundo de sus clientes, obtener insights poderosos, idear campañas para las necesidades de sus prospectos o sus clientes y ejecutarlas, en tiempo real, con absoluta precisión y en una sola ventana.