Open Finance va más allá de la simple transformación digital. Se trata de una revolución que transforma el sistema financiero gracias al aprovechamiento de los datos . Al permitir el intercambio seguro de información financiera entre diferentes actores, Open Finance abre el camino hacia un ecosistema de servicios y oportunidades de negocio en la que los bancos tradicionales están llamados a tener un rol de liderazgo.
En este artículo exploraremos algunas de las principales oportunidades que el desarrollo de un ecosistema financiero basado en Open Finance puede traer para regiones como Centroamérica, teniendo en cuenta sus antecedentes en el Open Banking y su futuro en una Open Economy.
Este es un resumen de lo que encontrarás a continuación:
Open Finance emerge como una evolución natural del sistema financiero tradicional. Por un lado, está impulsado por avances tecnológicos que facilitan que las instituciones financieras recolecten, aprovechen y compartan datos y, por otro lado, también se alimenta de la creciente demanda de los usuarios por tener acceso a servicios financieros que se ajusten a su situación, capaces de llegar en el momento oportuno y que, además, reflejen un conocimiento preciso de sus necesidades.
En 2021 Mckinsey estimaba que durante la próxima década , el impacto de Open Banking en países emergentes equivaldría al 4% del PIB. Esto se debe a cuatro factores:
En lo que sigue, revisaremos el papel de Open Banking para sentar los cimientos de un escenario de Open Finance y cómo éste último está llamado a evolucionar hacia una Open Economy.
El Open Banking sienta las bases al permitir la apertura de datos financieros entre bancos y terceros a través de APIs (interfaces de programación de aplicaciones). Esto posibilita la creación de nuevos productos y servicios, como pagos digitales y apps financieras que mejoran la experiencia del cliente y fomentan la competencia.
Un ejemplo de lo anterior son apps como como Nequi, PSE o Yape. Estas start ups no solo han profundizaron el intercambio de información entre comercios, bancos y usuarios, sino que también dan pie al desarrollo de una infraestructura tecnológica a partir de la cual surgen oportunidades de recolección y aprovechamiento de los datos que serán fundamentales para desarrollo de Open Finance.
En Centroamérica, el Open Banking puede ser mucho más que una avenida hacia la transformación del sector financiero. Por su gran capacidad de impactar la inclusión financiera y reducir los costos para los usuarios, el Open Banking tiene un enorme potencial para ampliar la cantidad de personas que participan del sistema financiero, especialmente en regiones donde existen grandes poblaciones rurales, que tienen su principal ingreso en el comercio informal o las remesas.
Podemos ver un ejemplo de esto en la implementación de pagos a través de códigos QR que llevó a cabo Bancolombia. Gracias a esto, esta institución financiera amplió su alcance en más de 1.100 municipios y sentó las bases para la recolección de datos de poblaciones que antes no participaban del sistema financiero.
Open Finance expande el concepto del Open Banking al incluir una gama más amplia de actores como aseguradoras, fondos de pensiones y otras instituciones financieras.
Esto permite la creación de productos y servicios que pueden estar basados en una mayor variedad de fuentes de información y que, por lo tanto, están en capacidad de ofrecer experiencias de usuario más integrales.
En Centroamérica, y en muchos otras regiones donde Open Finance empieza a abrirse paso, tres de los retos más importantes de cara al futuro son:
Aunque en este momento no son tan comunes en nuestro hemisferio, las super apps como WeChat, son un ejemplo de cómo, en un futuro cercano, los ecosistemas digitales van a tener un papel muy importante en la vida de los usuarios. Al articular, no solo servicios financieros, sino todo tipo de negocios como telecomunicaciones, retail, seguros, entre otros,
Aunque parezca lejano, un escenario en el que todo tipo de negocios hace parte de una red que comparte y aprovecha datos, puede estar más cerca de lo que parece.
En Colombia, por ejemplo, Rappi es una app que comenzó ofreciendo servicios de delivery para restaurantes y ahora integra en su ecosistema servicios financieros y de ventas minoristas, a través de alianzas con grandes actores del sector retail
Otro ejemplo de esto, son los marketplace liderados por instituciones financieras. En estos casos, los bancos proporcionan la infraestructura tecnológica para que sus usuarios puedan acceder a los bienes y servicios de marcas aliadas.
De cara a la llegada de Open Economy, es importante resaltar que la banca tradicional en Centroamérica, y en el mundo, tiene una ventaja especial y está llamada a tener un papel de liderazgo.
Además de custodiar los datos financieros de un gran número de usuarios, lo que incluye historiales de transacciones, saldos de cuentas y puntajes de crédito, la banca tradicional ha construido una sólida reputación en todo lo relacionado con seguridad y confianza.
En regiones donde Open Banking y Open Finance empiezan a abrirse paso, los bancos tienen una oportunidad única para empezar a generar más valor a partir de los datos y para liderar procesos en los que articulen empresas, usuarios, otras instituciones financieras y proveedores de servicios tecnológicos con el fin de crear ecosistemas digitales que mejoren la vida de la gente, como de hecho ya ha ocurrido en países como Singapur.
Por otro lado, las fintech, tienen un amplio historial construyendo soluciones financieras y, como ya lo hemos dicho, pueden trabajar junto a la banca tradicional para construir soluciones innovadoras que permitan alcanzar segmentos de la población que todavía no están bancarizados o que tienen un acceso limitado a servicios financieros.
La experiencia de las Fitech con tecnologías como la nube, la analítica de datos avanzada, inteligencia artificial y machine learning, hace que sean el aliado perfecto para construir un ecosistema de Open Finance y para comenzar a construir un futuro en el que se mejora mejorar la vida de la gente a través de productos y servicios innovadores.
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