En medio del caos y la velocidad características del mundo del servicio al cliente, es frecuente encontrarse con una pregunta crucial: ¿optamos por la eficiencia de la automatización o por la calidez del trato humano frente a nuestros clientes? Pareciera que para ganar automatización efectiva, debemos sacrificar atención y conexión con el cliente. Pero, ¿y si la tecnología pudiera hacer precisamente lo contrario?
Esa es la pregunta que responde Agentforce de Salesforce, una plataforma potenciada por la inteligencia artificial que no llega para sustituir personas, sino para convertirlas en su mejor versión. Salesforce permite a los equipos dejar de lado las tareas manuales y repetitivas para concentrarse en lo que de verdad importa: aportar valor estratégico y humano.
Agentforce es más que un simple chatbot. Se trata de un conjunto de herramientas de desarrollo que incluye agentes y plantillas listas para usar, permitiendo una implementación rápida que puede tomar solo unas horas.
Su principal valor es la versatilidad. Por ejemplo, los agentes inteligentes que ofrece pueden funcionar de dos maneras:
¿Qué hace únicos a los agentes de Agentforce? La respuesta no solo radica en que pueden comunicarse entre sí para ofrecer una atención integral, más humana y alineada con las necesidades del cliente, sino que también trabajan con las aplicaciones, los datos y la lógica existentes del negocio, actuando siempre con contexto y bajo políticas organizacionales claras.
La filosofía detrás es clara: la inteligencia artificial y los humanos son mejores juntos. Su colaboración permite alcanzar soluciones que ninguno podría lograr por separado.
En Pragma, hemos visto de primera mano el impacto de esta tecnología. Tuvimos el orgullo de crear el primer agente inteligente de América Latina enfocado en pensiones y cesantías para una de las administradoras de fondos más importantes de Colombia.
El reto era considerable. Cada mes, la compañía recibía cerca de 2.000 solicitudes relacionadas con reclamaciones de pensiones. El equipo de servicio al cliente lograba gestionar alrededor de 480 de estos casos mensualmente y las tareas más complejas podían tomar hasta 20 minutos por cada una.
Para solucionar este cuello de botella, implementamos un agente inteligente con Agentforce. Lo diseñamos para que entendiera a la perfección el flujo de negocio de la administradora, desde la radicación del caso hasta la definición del beneficio final.
Al liberar a los asesores de las consultas recurrentes, ahora pueden enfocarse en los casos que de verdad requieren un análisis profundo y un toque humano. Esto no solo aceleró los tiempos de respuesta, sino que mejoró la calidad del servicio y, por ende, la satisfacción del usuario.
El potencial de Agentforce más Pragma va más allá de la gestión de casos. Para el sector financiero, donde la seguridad y el cumplimiento son cruciales, este partnership ofrece soluciones robustas en varias áreas:
Agentforce de Salesforce nos ha enseñado que la inteligencia artificial, cuando se diseña con un propósito claro, tiene el poder de transformar una empresa y mejorar la vida de sus clientes. Es la prueba de que la tecnología es un catalizador para la eficiencia y el crecimiento, sin perder de vista el factor humano.
En Pragma, creemos que el éxito no se mide solo por lo que construimos, sino por las vidas que mejoramos. La transformación digital no se trata de adoptar la última tendencia, sino de encontrar las herramientas que nos permitan ser más estratégicos, más eficientes y, sobre todo, más humanos frente a nuestros clientes.
Si tu organización está lista para dejar de adaptarse y empezar a liderar, es momento de conversar.
¡Comienza ahora con Pragma!