Durante el proceso de rediseño de un portal web, el manejo adecuado de las redirecciones es crucial para preservar el tráfico orgánico y evitar pérdidas significativas en términos de posicionamiento en los motores de búsqueda.
En este artículo, abordaremos 8 errores comunes de redireccionamiento que se producen con frecuencia durante un rediseño web, así como los tipos de redirecciones y su importancia en casos de variación de dominio o estructura de URLs.
Al final del artículo podrás encontrar un check-list que podrás utilizar para garantizar el redireccionamiento efectivo de tu sitio web durante su rediseño. La siguiente es una tabla con los contenidos que vas a encontrar en este artículo.
Antes de entrar en materia es importante definir términos fundamentales:
Un rediseño web es el proceso de hacer cambios significativos en la apariencia, estructura y funcionalidad de un sitio web existente. Implica actualizar y mejorar diferentes aspectos del diseño y la experiencia del usuario para lograr objetivos específicos, como mejorar la usabilidad, la estética, la accesibilidad, el SEO y el rendimiento del sitio.
Una redirección es una técnica que se utiliza para dirigir a los usuarios y los motores de búsqueda desde una URL antigua hacia una nueva URL.
Se hace mediante instrucciones en el servidor que indican al navegador o al motor de búsqueda que la página ha sido movida permanentemente o temporalmente a otra ubicación.
Existen varios tipos de redirecciones utilizados para llevar el tráfico de una antigua URL a otra. Los dos tipos de redirecciones más comunes son:
Estas redirecciones indican que una página se ha movido permanentemente a una nueva URL. Son recomendadas para el redireccionamiento de contenido antiguo a nuevas ubicaciones, ya que transfieren la mayoría del valor de posicionamiento o Page Rank a la nueva URL.
Supongamos que tienes un sitio web con una página llamada "/quienes-somos/" y durante el rediseño se definió que la nueva url será "/acerca-de/". Como es un cambio permanente para un contenido, puedes utilizar una redirección 301.
Así, cuando alguien intente acceder a "/quienes-somos/" desde los resultados de los motores de búsqueda, esta regla de redirección se activará y el usuario será redirigido de forma permanente (código 301) a la nueva página "/acerca-de/".
Esto asegura que los motores de búsqueda y los navegadores actualicen sus índices y enlaces a la nueva ubicación.
Las redirecciones 302 indican que una página se ha movido temporalmente a una nueva URL. Son apropiadas cuando se espera que la URL de la página redireccionada regrese a su URL original en un futuro cercano.
Supongamos que tienes un sitio web y deseas redirigir temporalmente un contenido llamado "ropa-hombres" a uno llamado "black-friday-ropa-hombres". Esta acción se hace por varios motivos, por ejemplo, cuando quieres hacer un diseño distinto por una temporada de promociones.
puedes utilizar una redirección temporal 302 para cambia la página principal por la página de promociones, por determinado tiempo sin perder el ranking de posicionamiento
Cuando alguien intenta acceder a "ropa-hombres" en los resultados de los motores de búsqueda durante el tiempo definido, esta regla de redirección se activará y el usuario será redirigido temporalmente (código 302) al página "black-friday-ropa-hombres".
La redirección temporal indica a los navegadores y motores de búsqueda que la página original es solo temporalmente inaccesible y se espera que vuelva a estar disponible en el futuro.
Se pueden presentar varios casos en los cuales debes utilizar las redirecciones web de forma correcta, aunque para muchas podemos decir si es 301 o 302 siempre va a depender de tu estrategia de redireccionamiento.
Las situaciones más comunes para realizar redirecciones son:
Una de las herramientas deTesting” más conocida por los analistas de calidad es Selenium. Aunque Selenium no es una herramienta de SEO propiamente, se puede utilizar para automatizar ciertas pruebas o auditorías SEO como pueden ser:
Aunque normalmente el rediseño de un sitio web se hace con la intención de mejorar la experiencia de usuario, la manera en que se muestra el contenido, la integración de nuevas funcionalidades o mejorar el diseño visual, puede ocurrir que este cambie radicalmente en su manera de ser leído por los motores de búsqueda.
Uno de los aspectos más afectados al momento de hacer un rediseño, es la arquitectura del sitio, ya que normalmente es definida por una jerarquía de URLs que establecen los flujos de navegación.
Al ser afectada la jerarquía, puede ocurrir que tengamos errores 404 o que los usuarios se enfrenten a ingresar desde Google a contenido que ya no existe.
De esta manera, una URL que antes estaba compuesta por:
/productos/hombre/
puede cambiar a
/productos/ropa/hombre/
Si los usuarios que antes encontraban tu tienda por Google ingresan a la antigua URL, encontrarán un error 404 y pensarán que los productos ya no existen, pero, ¿que pasaría si el mismo sitio web corrigiera esta dirección obsoleta y lo enviará a la dirección nueva? tu usuario podría encontrar lo que está buscando sin tener una mala experiencia.
Para eso se utilizan las redirecciones después de un rediseño. Abordaremos esto más a profundidad al avanzar el artículo.
Hasta ahora ya sabemos que son las redirecciones, que tipos hay, cuando se deben aplicar y por qué es necesario que hagamos redirecciones cuando realizamos cambios en nuestro sitio web que afecten la estructura de URLs..
A continuación te contamos 8 errores comunes que ocurren durante los rediseños y migraciones de sitios web a los cuales debes poner especial atención.
Uno de los errores más comunes es no establecer redirecciones para las URL antiguas hacia las nuevas. Esto puede resultar en páginas inexistentes o enlaces rotos, lo que afectará negativamente el SEO, el tráfico de usuarios al sitio web y la experiencia del usuario en los motores de búsqueda.
Al igual que hacer mal una redirección, o no hacerla, si no implementas un plan de redirecciones que te permita llevar el control en el lanzamiento de tu nuevo sitio, puedes enfrentarte a varios problemas:
Es importante asegurarse de que las redirecciones estén configuradas correctamente. Los errores de redireccionamiento, como redirigir todas las páginas antiguas a la página de inicio o redirigir incorrectamente a páginas irrelevantes, pueden confundir a los usuarios y afectar negativamente la clasificación en los motores de búsqueda.
Supongamos que tienes un sitio web y estás realizando un rediseño en el que estás cambiando la estructura de tus URL. Sin embargo, en lugar de implementar redirecciones adecuadas, cometes los siguientes errores:
Los bucles de redireccionamiento son el tipo de errores que más encontramos durante el proceso de desarrollo de un sitio, generalmente ocurren cuando las variaciones de un dominio se apuntan entre sí.
En este caso, el desarrollador crea una regla existente para que el usuario ingrese a "https://www.pagina.com" y redirige a "https://pagina.com" sin saber que la versión sin www también cuenta con una redirección a su versión con www.
Esto crea un bucle de redirecciones infinito que termina por arrojar un error 500 en el servidor, creando problemas de rastreo a los motores de búsqueda.
También puede ocurrir con redirecciones sobre la respuestas de las peticiones http y https .
supongamos que tenemos el siguiente caso:
Un sitio “www.ejemplo.com” es redireccionado a “ejemplo.com”, pero “ejemplo.com” ya contaba con una redireccion a “www.ejemplo.com”
Al ir del sitio A al sitio B y del sitio B al sitio A se crea un bucle de redirecciones
Una cadena de redirecciones ocurre cuando hay múltiples redirecciones consecutivas para llegar a una página específica.
Este comportamiento puede afectar negativamente el tiempo de carga de la página y confundir a los motores de búsqueda, lo que resulta en una pérdida de posicionamiento y una mala experiencia del usuario.
Supongamos que tienes las siguientes páginas:
Página A: "/page-a"
Página B: "/page-b"
Página C: "/page-c"
Página D: "/page-d"
En algún momento, eliminas la página A y la diriges a la B, luego eliminas la B y haces una redirección a la C, con el tiempo, eliminas la C y haces una redirección a la D.
Cuando alguien intenta acceder a la Página A, se redirige automáticamente a la Página B debido a la primera regla de redirección. Luego, debido a la segunda regla de redirección, son redirigidos nuevamente de la Página B a la Página C, y finalmente, debido a la tercera regla de redirección, son redirigidos a la Página D.
Esto forma una cadena de redirecciones, donde varias redirecciones consecutivas son necesarias para llegar a la página final deseada.
Para evitar este problema, debes procurar que la A vaya a la D, al igual que la página B y C. De esta manera, cuando un usuario ingrese a cualquiera de las opciones posibles siempre llegará directamente a la página D.
Una redirección de poco valor semántico se refiere a una redirección que lleva de un contenido A a un contenido B de manera correcta, pero los contenidos no están relacionados entre sí.
Esto puede generar confusión en el usuario, pérdida de posicionamiento y por consecuencia, pérdida de tráfico orgánico.
Supongamos que tienes una tienda de ropa y acabas de eliminar un producto de la categoría “ropa para hombres”. Este producto es un cinturón de cuero café y para no perder el tráfico a ese producto, haces una redirección a otro accesorio llamado “cinturón de cuero café y blanco”, pero esta vez el producto se encuentra en la categoría “ropa para mujeres”.
Aunque ambos productos pueden tener la misma palabra clave, su relación semántica y la intención de búsqueda son completamente distintas. Este comportamiento podría confundir al usuario y generar en él un sentimiento de frustración al no encontrar lo que estaba buscando.
No realizar pruebas exhaustivas de las redirecciones y no realizar un seguimiento adecuado después del rediseño puede llevar a errores no detectados y a problemas persistentes.
Es importante realizar un monitoreo continuo para asegurarse de que todas las redirecciones funcionen correctamente y que no se pierda tráfico ni posicionamiento en los motores de búsqueda.
En Pragma recomendamos que las redirecciones se vayan eliminando cada cierto tiempo cuando ya no tengan impactos, es decir, cuando las herramientas de medición nos muestran que ya no están siendo usadas para acceder a nuestro sitio web.
De esta manera, podemos ayudar al servidor a reducir las peticiones y a los motores de búsqueda a rastrear de manera más efectiva otros contenidos de nuestro sitio web.
El último pero no el menos común de los errores de redireccionamiento es, no resolver las solicitudes de redireccionamiento de un dominio secundario.
Los motores de búsqueda interpretan las URL con y sin www como dos sitios web diferentes. Ocurre lo mismo con las versiones http y https de su sitio web.
Este comportamiento puede afectar negativamente la visibilidad y el posicionamiento de tu sitio en los motores de búsqueda, creando una versión de sitio web distinta para cada versión de dominio.
Tener una versión canónica significa, tener una versión específica a la cual deben llegar todos los usuarios.
Supongamos que el dominio de nuestro sitio web es ejemplo.com y que esa es nuestra dirección canónica, es decir, nuestra dirección principal.
Por buenas prácticas y por requisito de Google para poder indexar tu sitio en motores de búsqueda debes instalar un certificado de seguridad, entonces, tu primer redireccionamiento permanente será pasar de http://ejemplo.com a https://ejemplo.com.
Luego, debemos solucionar la versión con www, lo que indica que tu siguiente acción es tomar https://www.ejemplo.com y redireccionarlo de manera permanente a https://ejemplo.com
Pero, recuerda que también hay una versión http que tiene www, entonces deberas redireccionar http://www.ejemplo.com a https://ejemplo.com
De esta manera tus redirecciones quedan de la siguiente forma:
así, cuando un usuario intente ingresar a tu sitio web usando www o solo ingresando ejemplo.com, tu servidor le dará la instrucción a tu explorador de que solucione la url canónica https://ejemplo.com
Uno de los errores más comunes durante el proceso de redireccionamiento es utilizar una redirección 302 en lugar de una redirección 301 cuando vamos a cambiar la estructura o arquitectura de urls en un sitio web.
Este tipo de redirección no ocasiona problemas a la experiencia de usuario, pero afecta algunas otras variables de posicionamiento ya que Google no elimina las URLs antiguas de los resultados de búsqueda, y además, no agrega las nuevas.
Recuerda que mientras haya una redirección 302, los motores de búsqueda siempre estarán esperando a que la URL nueva retorne a la URL inicial.
Ya que es claro la importancia de crear e implementar redirecciones al momento de realizar un rediseño web, ten en cuenta que cualquier error de redirección puede traer problemas a nivel de experiencia de usuario o impactar en el posicionamiento.
Aunque muchas empresas consideran que el redireccionamiento se puede realizar una vez terminado el sitio web, muchas tardan lo suficiente para perder más del 40 o 50% del tráfico total de su sitio antes de volverse a recuperar.
Si tenemos un plan de redireccionamiento, sea durante un rediseño, una migración o simplemente en el día a día, nuestro sitio estará preparado para recibir los usuarios brindándoles la mejor experiencia posible, desde los motores de búsqueda hasta la conversión.
Si enfrentas una migración o lo harás en el futuro, no te preocupes, aquí te compartimos un check-list que te ayuda a crear un plan de redirecciones para que reduzcas el impacto durante su lanzamiento de tu nuevo sitio.
Descárgalo y si tienes alguna duda puedes contactarte con nosotros. Estamos preparados para ayudarle a tu empresa a llegar a los primeros resultados de búsqueda después del rediseño de tu sitio web.
Nota importante:
Tenga en cuenta que, en cualquier migración o rediseño que implique realizar redirecciones, el sitio se va a ver afectado a nivel de posicionamiento, tráfico y visibilidad.
Las pautas que hemos compartido hoy están enfocadas a generar el menor impacto posible durante el lanzamiento de tu nuevo sitio web. En Pragma hemos logrado migraciones con impactos menores a un 20% en la pérdida de tráfico y una recuperación y repunte de alrededor de dos meses.